CRISIS ECONÓMICA, CRISIS DE RECURSOS, CRISIS DE GESTIÓN
Esta es a nuestro parecer la situación, la crisis económica se ha cebado con la pesca marítima de recreo, el cese de actividad de muchos aficionados por la falta medios económicos es notoria para todos aquellos que estamos en los puertos, el cierre parcial y definitivo de multitud de empresas y comercios relacionados es evidente para el que tenga un mínimo de relación con el sector náutico, la dificultad de los clubes náuticos para atender las concesiones portuarias es conocida, solo hay que observar la reducción de afiliaciones y concursos, en resumen la crisis económica general asfixia a la pesca recreativa.
La pesca marítima de recreo sufre al mismo tiempo una segunda crisis. La sobrepesca de los recursos pesqueros es clara y las administraciones deben proceder a una reforma pesquera en profundidad; desde la Comisaria Europea de Pesca María Damanaki hasta la menos influyente de las ONG´S medioambientalistas nos lo recuerdan a diario. La sobrepesca no ha aparecido de la noche a la mañana, ocurre que hoy disponemos de información para conocer el porqué de la sobrepesca y por ello sabemos que sufrimos una segunda crisis, de la que la pesca recreativa no es responsable.
Pero como no hay dos sin tres, la pesca recreativa sufre una tercera crisis y esa es la de gestión. En el pasado la pesca recreativa era la gran desconocida de las administraciones pesqueras y en la falta de conocimiento justificaban su desinterés. Hoy la información no es completa, pero es suficiente para orientar su ordenación. Ocurre que las administraciones pesqueras uno de cuyos objetivos es la obligada reducción drástica de la capacidad de la flota profesional, especialmente en el Mediterráneo, no son capaces de compaginar el ordenamiento de los dos sectores complementarios, uno al alza y otro en declive. La actitud de la mayoría de nuestros gestores da a entender que al ordenar al sector recreativo podrían estar “traicionando” al sector profesional y entran en lo que podríamos llamar el “síndrome de fidelidad”, en la crisis de ideas, en resumen en la crisis de gestión.
Hay cuestiones que solo tienen solución dentro del contexto nacional o internacional, pero la crisis de gestión, dando por entendido que nuestros funcionarios tienen la capacidad profesional suficiente, puede solucionarse con voluntad política, eso es lo que falta y eso es lo que todos aquellos sectores relacionados con la pesca marítima de recreo tenemos que exigir: Los que disfrutamos de la actividad los tripulantes de mas de 100.000 embarcaciones y los que viven del desarrollo de nuestra actividad que generan más de 1.000 millones de € de impacto socioeconómico y representan más de 10.000 puestos de trabajo. Esperemos que no tengamos que lamentar aquello de “entre todos la mataron y ella sola se murió”
Comunicado de la PRR, Pesca Recreativa Responsable