La conciencia

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El otro día me encontré en el congelador unas rodajas de pescado que había comprado mi mujer sin saber bien de que se trataba. Sobre el celofán una pegatina descolorida ponía "Tintorera", sin nombre científico ni más detalles. Vete tu a saber en realidad de que se trataba, me extraña que un escualo de ese tipo pueda acabar en los bancos de un supermercado. Fue liquidada en la parrilla y aconsejé a mi mujer que no volviera a comprarlo porque hay que evitar de alimentar ese tipo de venta, ya que de tiburones quedan cuatro y cuando se acaben, en los océanos, se va a liar una muy gorda.

Yo tampoco estoy exento de pecado, hace un par de años me encontré con una bandejita que ponía "Marrajo" y atraído por la fama de sus carnes lo compré y encima me gustó, pero nunca jamás repetí y eso que he vuelto a verlo varias veces. Este verano, en un supermercado en Roma había un corte de Marlin del Pacífico con tanto de nombre en latín, me sorprendió muchísimo y pregunté al pescadero porque lo tenía y añadí que no lo deberían de vender soltándole la charla del siglo.

No se acaba aquí el cuento porque sigo pecando mucho cuando se trata del Atún, no se resistirme a un buen lomo que limpio y congelo con cariño para transformarlo en carpaccio o a un nigiri de toro bien preparado, por el que podría llegar a pelearme con mi hija que se los come de dos en dos. Por el otro lado me inflo a pescado de piscifactoría y rara son las veces que compro algún que otro bicho de origen extractiva, bien por mi confundida conciencia bien por el precio que tienen.

Para una persona que ama pescar y comer pescado se presentan tiempos difíciles porque te pongas como te pongas de alguna manera estás "atacando" el ecosistema aceptando métodos de pesca destructivos o de acuicultura que desde luego no está exenta de culpas. Los pienos provienen en larga parte de pescado extraído del mar en toneladas y vendido a costes muy bajo, inclusive especies deportivas que tanto apreciamos. Más complicado si esta persona no tiene el mar cerca y no puede disfrutar de aquella esporádica captura para compartirle en la mesa con la familia, que sería un final coherente.

Sale luego el lado realista que dice que todo esto de alguna manera es inevitable, y que cambiar este sistema llevará mucho tiempo y algún que otro desastre biológico: así de burdo es el ser humano. Sigo royéndome la conciencia con mis dudas y mientras pido un SOS para ver si alguien comparte mis dudas e incongruencias.

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5 thoughts on “La conciencia

  1. Adal

    Casualidades de la vida.....ayer tocó hacer la compra en el super y rebuscando en el cajón de congelados encontré esos filetes de "Tintorera", en mi imaginación intenté unir todas aquellas rodajas (como si de un escaner se tratase) para completar la morfología del animal en cuestión, pero sigo aun con mis dudas de si el contenido se correspondía realmente con lo que rezaba la etiqueta.

    Un saludo,
    Adal

    Pd. Por cierto, hoy para almorzar pollo al horno.....por supuesto.

  2. PCh

    Los que vivimos en las costas tenemos ocasión de comer pescado de muchísimas formas. Aún puedes conseguir chanquetes y morrallita, si la conciencia te lo permite.... LA oferta de mero, o de bogavante, o de centollo, es ocasional, teniendo en cuenta que el paro hace que haya muchas personas "buscándose la vida..." Por otro lado ,la acuicultura "eco-ilógica" (cuanto pescado se necesita para producir un kilo de pescado ????) llena la oferta de las pescaderías en las grandes supercificies... Vamos al desastre ... Sin embargo, a mi me parece que lo peor es para el atún con ésta moda japonesa que nos ha entrado a todos. Ya hay barcos piratas chinos en el Mediterráneo pescando atún rojo para venderlo , supongo que en Japón....
    Creo que no se ponen zonas de veda. Un ejemplo, sabéis porqué en Almería hay muchos mas peces que aquí ¿ Porque no tengo duda de que la reserva del Cabo de Gata actúa como vivero natural de especies... Es así de fácil. Hace años alguien propuso dividir la Costa del Sol en 3 zonas, dos pescables alternativamente y una de reserva intocable. La idea fue imposible de poner en práctica....
    Y que fácil se reproduce el pescado !!!! Pero... Somos los depredadores - plaga de éste planeta.

  3. Asiento con el anterior comentario en que la acuicultura tal y como se desarrolla actualmente no es precisamente la mejor forma de combatir la pesca extractiva, puede llegar incluso a ser más dañina. Y mucho menos creo que dejar de comer pescado tampoco sea la solución, hay que comer de todo, ya es cuestión de salud personal.

    Personalmente soy de los que va por rachas, hay veces que suelto todo el pescado que pesco, y otras veces que me llevo a casa parte, o todo. Soy un forofo del pescado desde el punto de vista gastronómico y rara vez como un pescado que no sea el que yo mismo pesco, limpio, fileteo, y cocino para el resto de la familia y amigos. Por lo que particularmente el disfrute de pescarlo lo extiendo al resto de los que me rodean ya en la mesa.

    La solución a todo esto es difícil, pero a poco que se protegen zonas o simplemente se cumplen las leyes todos podemos estar en completa armonía.

    En una de las zonas de pesca que frecuento hace un par de años se sufrió un invierno durísimo que abocó a los profesionales a estar en puerto durante muchísimo tiempo, eso se tradujo en un buenísimo año de pesca ya que se había producido una veda obligada. Algo tan simple y a la vez contudente que enlaza con un estudio no muy antiguo que leí hace poco, en el cual se decía que si se dejara de pescar tan sólo un par de años en todos los mares de manera profesional, y luego se reanudara la actividad respetando simplemente las leyes actuales pero al pie de la letra, habría tanto pescado y tanto trabajo por delante que la recuperación y mantenimiento del sector sería total y viable a futuro.

    En fin, cuestión peliaguda.
    Saludos.-

  4. Me dan miedo los fanatismos ecológistas.
    Me dan asco los políticos que nos gobiernan y los banqueros que nos administran.
    Me satisface que los pobres asalten grandes superficies y atraquen sucursales bancarias.
    Me preocuparía no llevar una dieta completa, sana y equilibrada.
    Me dan pena los tiburones.
    Me produce placer comer tintorera. Por aqui abajo la venden como atún blanco a las amas de casa. La otra voz que creo recibe el pez es la de "quella" pero esta más dirigida a iniciados en la materia.
    Me irrita el descontrol consentido que provoca la pesca industrial extractiva.
    Me cansa el hipócrita discurso del pescador acaricia peces.

  5. Este es un tema muy interesante y en el que también he reflexionado largo y tendido. Como sabes suelto todo pez que cae en mis manos siempre que esté en perfectas condiciones, pero también como pescado a veces (aunque nunca compro ni pido en un restaurante). Respeto al que se lleva un pez para consumo personal y al que compra en la pescadería porque no sabe pescar.

    Y es que los problemas del mar todos aquí los conocemos, pero quizá no lo suficientemente a fondo como para actuar en consecuencia, manteniendo un nivel de equilibrio entre la ecología, la economía sostenible, la salud, la gastronomía, el deporte y los sentimientos.

    Me explico: no todos los tipos de pesca ejercen la misma presión sobre las mismas especies, ni sobre las mismas tallas. No se puede culpar por ejemplo, a la pesca de arrastre, de que ya no haya meros a menos de 40 metros de fondo. Ni tampoco se puede culpar al pescador de caña de que el atún esté en peligro de extinción. Es así de simple. Tampoco son igual de sensibles todas las especies de peces! No es lo mismo llevarse a casa un Jurel o una caballa, que un mero o un cabracho, pues el pescado azul es altamente móvil, crece muy deprisa y recupera sus stocks pesqueros con rapidez, mientras que el pescado de roca es de crecimiento lento y costumbres sedentarias, siendo muy sensible a la sobrepesca.

    Mi opinión más sincera, es que si se practicara una buena gestión de los recursos pesqueros, podríamos llevarnos todos algún pez que otro a casa, además de disfrutar de grandes jornadas de pesca. Sin MÁS. Como hacerlo?
    -Creando más reservas, con distintas restricciones y alternándolas, algunas porque no, reservas donde solo se permita la pesca deportiva sin muerte.
    -Limitando algunos tipos de pesca dañinos como la pesca submarina
    -Prohibiendo totalmente la pesca de arrastre
    -Fomentando la pesca tradicional y artesanal en contra de la profesional
    -Convirtiendo todas las desembocaduras y ríos en acotados de pesca sin muerte
    -Y sobre todo, poniendo vigilancia en el mar y endureciendo, pero mucho! las leyes y sanciones. Vamos que cárcel, como pasa en Estados Unidos si te pasas de la ralla.

    Aparte de esto, para el atún haría un reglamento especial para la pesca deportiva, incluso permitiendo que se pudieran embarcar uno o dos ejemplares al año por pescador, pero que como en Australia, no te permitan pescar si no vas con equipos suficientemente potentes, ni te dejen subir a bordo para las fotos a todos los peces que quieras.

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