En este blog suelo limitarme a jugar con el tema tan frívolo y ludico que es nuestra afición, la pesca deportiva. No suelo salir de allí, esta es la naturaleza misma de la página y a pesar de que algunas veces me gustaría saltarme la valla y cruzar otras fronteras intento seguir en mi línea. Sin embargo ayer un amigo me enseñó un vídeo que por lo menos me dejó impactado, por no decir tocado en lo más profundo.
En un momento en el que todo parece caernos encima, y el terreno faltar debajo de los pies hay personas que nos enseñan cuanto son de relativos los problemas cotidianos y que se puede conseguir con el amor y la voluntad. Aquí no hay cursiladas ni se busca pena o compasión, simplemente se transmite el mensaje más poderoso del mundo. Un mensaje que rompe moldes y te devuelve la fe hacía esta raza tan frágil a la que pertenecemos.
Perdonarme la digresión.