No se que es lo que pasa exactamente con estos señuelos, pero al parecer hay quien no pueda vivir sin ellos. Desde que empecé a traerlos desde Australia hace ya unos dos o tres años, hasta ahora que vienen directamente de Normark España, creo que he vendido docenas y docenas de los Giant Jigging Shad de Storm. Primero se aventuraron los jiggers del Estrecho, sobre todo con las Corvinas, luego empezaron a entrar Meros y Abadejos, y finalmente ya no se que es lo que consiguen pescar con ellos. Seguro que más de una Sama, Pargo u otro depredador ha caído. También los de menor peso han tenido éxito en el Mediterráneo, sin embargo los Canarios no suelen utilizarlos mucho. Parecen uno de aquellos productos que no conocen edad ni desgaste, como el conejito de Duracell... ¡y venga Giant Jigging Shad!