Hay situaciones en la vida que, de alguna manera, te marcan o por lo menos, aún sin llegar a tanto, te dejan pensativo más de lo habitual, este es el caso, la del ladrón de carpas.
La noche antes no pude dormir, parecerá ridículo pero a 53 años me sigue pasando lo que me pasaba de niño. La emoción de la pesca, sobre todo cuando vas a por la primera de la temporada, puede con mi sueño. Volvía a por las carpas a spinning. FFF al estado puro. ¿Estarán?
Quería escribir un post dedicado a el invierno y la pesca, es decir, poniendo la dichos temporada a parir, pero al final me he decantado por algo más diplomático, simplemente me voy a acordar de todos sus muertos.