El Jig Casting es una técnica de pesca que reúne algunas características muy interesantes, si tenéis un momento las vamos a ver juntos.
La pesca a Jig Casting se practica con jigs de metal, plomo y aleaciones o tungsteno y si queremos ser muy tiquismiquis también hay híbridos de metal y plástico que desenvuelven las mismas funciones con algunas sutiles diferencias. Pero vamos a ver las ventajas de esta técnica de pesca a spinning desde costa.
Number one la distancia de lance, tadaaaan. Los jigs de metal vuelan lejos y hace falta encontrar uno con un diseño equivocado, normalmente copias baratas chinas, para que no vuele lejos, en definitiva, es un cacho de metal con sus innegables ventajas a la hora de triturar metros. Para los que pescan a spinning desde costa esta es una prerrogativa brutal porque, por la mítica ley de Murphy, sabemos que la pajarera que tendremos más cerca será siempre 10 metros más distante de nuestro alcance de lance y solo un plomazo podría reducir e inclusive cubrir esa distancia y permitirnos llegar a caer en el medio de la melee.
Los jigs de metal no son caros, normalmente el precio es inferior al de cualquier señuelo, pero también hemos de decir que cuando tocan el fondo a veces se quedan enganchados y los perdemos pero hay truquillos para minimizar las bajas. Quitemos los triples, que además son poco funcionales y en este tipo de señuelos artificiales bastante inútiles, y dejemos uno o dos assist hooks, casi diría uno solo para los jigs más pequeños, hasta veinte o treinta gramos, por ejemplo, y dos en los de mayor tamaño. También, cuando sondeamos una zona nueva podemos sacrificar los jigs más viejos y desgastados para ver si el fondo es tramposo y una vez tomada la medida al ambiente, ir a por nuestros favoritos.
Otra característica sobresaliente de la pesca a Jig Casting es la versatilidad de esta técnica y por diferentes razones. En el mercado hay una extraordinaria oferta de jigs, pesos, colores y diseños distintos y esto nos brinda la oportunidad de escoger cada modelo según la velocidad de bajada que queremos alcanzar, si queremos pescar cerca de la superficie, a medias aguas o lo más cerca del fondo posible. Es decir, el señuelo puede peinar y sondear cada capa de agua sin dejar metro cúbico sin explorar. También los equipos tienen su importancia, además de la potencia adecuada de la caña, es imperativo escoger el trenzado y bajo de línea más adecuado para que el jig baje libremente aprovechando todo su potencial y llegue a la profundidad elegida con la rapidez que queramos. Es evidente que un jig alargado y estrecho y con más peso en la parte trasera bajará más rápido que ninguno, este podría ser ideal cuando necesitamos llegar a fondo lo más rápido posible cortando viento y marea, pero si los depredadores está a medias aguas mejor apostemos por un casting jig más ancho y con una distribución de pesos asimétrica para que desarrolle un movimiento ondulatorio más evidente y pueda quedarse en el sitio más tiempo. Si finalmente queremos una caída muy lenta tendremos los jigs ovalados o los de “shore slow”, que nos dejan amplio espacio de maniobra para pescar con ritmo lento y ponderado, peinando con cura la zona en busca de peces más recelosos o encuevados.
Para practicar el jig casting desde orilla tenemos señuelos de hasta 120/150 gramos, pero al menos en España no tienen muchos fans, mientras curiosamente en Italia son muy demandados. En lo que nos toca podemos hacer un jig casting ultraligero con señuelos de hasta 7 gramos, ligero hasta 20 gramos, medio hasta 30/40 gramos y de ahí seguidos. Los micro jigs son seguramente los que más alegría nos proporcionan, es como cuando éramos niños que íbamos buscando peces, de cualquier tipo y sobre todo color, y no importaba el tamaño. Es una pesca divertida, desenfadada y con muchas picadas. En las otras categorías se reduce el número de ataques o capturas y, probablemente aumenta el tamaño, pero recordar, que un jig pequeño, en la misma zonda de pesca, siempre tendrá muchss más novias que un jig pesado, simplemente porque en la mar hay más peces chicos que grandes.
Me gustaría volver por un momento a evidenciar unos puntos que me parecen importantes. Más ligero es el equipo, sobre todo la combinación trenzado/bajo, mejor será la caída del casting jig y más naturalmente se moverá, hemos de intentar que toda la cadena sea equilibrada para poder pescar al 100% de efectividad y al mismo tiempo sacar a los depredadores más voluminosos. Es preciso llevar diferentes modelos de jigs para poder enfrentarnos a las distintas condiciones meteorológicas y al escenario que tendremos delante. Jigs estilizados con el peso en la parte posterior, jigs alargados con distribución de peso asimétrica, hierros estilo “wide” anchos con diferentes distribución de peso, casting jigs ovalados para las caídas más lentas y así seguido.
Pescar a Jig Casting puede llegar a ser muy entretenido y a veces la única manera de sacar un pez, tengo amigos que se han enamorado de ellos e inclusive lo usan en agua dulce, para alcanzar los peces que durante el verano estacionan en mucha profundidad, así mismo hay pescadores que usan modelos un poco anchos para pescar casi a skipping, rebotando en la superficie, para que comprendáis cuanto sean polifacéticos. En definitiva, se podría salir a pescar con una caña y una caja de casting jigs, independientemente del escenario, y pasarlo bien, con capturas. Pero ojo, no es lanzar y recuperar, hay que cogerle el tranquillo al juguete, darle vida, no es más que un trozo de metal.
Siete Paseantes hundidos para lubina, ¿no podían ser 5 o 10? No, tienen que ser siete, los magníficos siete o los siete mejores que tenemos en la tienda, en fin, vamos que el espacio es tirano.
El SPM de Bassday merece abrir el desfile simplemente porque es el más conocido, el más utilizado y con muchas probabilidad el más vendido de la tienda y con más vendido quiero decir el señuelo que en absoluto más se vende en Caranx.net. Hay poco que contar sobre ello ya que lo habéis probado casi todos los que estáis leyendo este artículo, pero me gusta evidenciar por un momento el diseño tan estilizado que no hay en otros paseantes hundidos para lubina, es especial y recuerda el perfil de algunos cebos de los que se nutre a menudo nuestra reina. Hay cuatro medidas disponibles: 55mm, 75mm, 90mm y 110mm las mejores para la lubina son las tres superiores, quizás con el 90mm como arma todoterreno y el 110mm ya para aventurarse en playas y veriles donde la corriente, el viento y el oleaje demandan más alcance balístico.
Skid Slider 95 de PoziDrive Garage
Con sus 22gramos de peso el Skid Slider se lanza muy lejos y esto ya le brinda cierta ventaja a la hora de ir acosando robalos desde costa, pero si solo fuera el lance su punto fuerte… Agárrate que aquí hay un vídeo, entra en este enlace y vete al final de la página. Siéntete y disfruta que son dos minutos en los que verás lo que llega a hacer este paseante hundido, bien con recogidas lentas, bien dándole fuerte a la manivela se aprecia el gran trabajo que hacen los locos de PoziDrive Garage. El meneo es impepinable, no tiene desperdicio y el muñeco se mueve como si no fuera de ABS, absolutamente recomendable ¡cispúm!
Yoichi de IMA
También en este caso tenemos un vídeo y se enciende la bombilla, vaya, ¿esto es lo que puedo hacer con este plasticorro? Si te gusta el estilo japo simplemente le tienes que dar al gira-gira, pero si eres más inquieto, como la mayoría de nosotros, entonces usarás el Yoichi de IMA como un paseante hundido y le sacarás mucho partido. Este es otro d ellos que se lanza lejos, pesa 18 gramos la criatura, pero, si quieres un modelito más discreto que se menea muy bien en aguas más someras o cuando hay pez pasto pequeño tienes el Yoichi 70 Diet de IMA de solo 9 gramitos.
Flat Flutter 95 de PoziDrive Garage
Me dice un amigo, este es el paseante hundido para lubina definitivo, el que te permite un control preciso sobre el movimiento y tanto da que viaje debajo del agua, sabes perfectamente que se está moviendo como tú le mandes. En este caso el vídeo es un media birria, no se ve mucho pero suficiente para apreciar que el coleteo del Flat Flutter 95 es más estrecho que en otros y que hay amplio margen para juguetear con ello. Pesa 20 gramos y, evidentemente, no tiene un freno aerodinámico, vuela, así de fácil, y peina las playas como si no hubiera un mañana. Toma nota.
Honey Trap de IMA
Me encanta ver este señuelo meneando la cola como un labrador. Es exagerado el movimiento que tiene, incluso gracioso hasta que le metan un viaje. Aquí también hay un vídeo que nos viene en auxilio, míralo en la página del Honey Trap de IMA, vas a entender perfectamente porque nos gusta tanto. Hay dos medidas disponibles 70mm x 12g y 95mm x 20g, tu sabrás muy bien cual utilizar y en que lugar, es un señuelo que no debería de faltar en tu caja.
Re-Bird 90 de Reed
Canela fina por aquí, presten atención porque ya hemos llegado a uno de los niveles más elevados de frikismo. Estos japos hacen cosas muy peculiares, como el Feel, que no hemos metido en esta selección porque muy paseante hundido no es, es decir, meneo tiene lo justo. Volviendo a nuestro sujeto, el Re-Bird de Reed se lanza bien, que es un poco la tónica general de estos señuelos, todos disfrutan de buen vuelo, y una vez en el agua zigzaguea con más amplitud, reconoce la derecha y la izquierda y aprovecha al máximo el ángulo que le deja el bajo de línea y nuestros tirones. Apunta en la lista para cuando necesites hacer spinning desde costa con uno de estos siete paseantes hundidos para lubina.
ZigZag Bait de PoziDrive Garage
Y con la Z acabamos ya el tostón sobre los magníficos siete paseantes hundidos para lubina. Este está que se sale, es difícil que no te enganches al movimiento del ZigZag Bait porque es de traca, vamos que juega en la Champions y además sin dificultad ninguna, solo tienes que limitarte en darle al motor de la muñeca. En principio muchos de estos señuelos caen dentro de la categoría “slalom” pero aquí seguimos llamándolos paseantes hundidos, que se nos da mejor, hay docenas de categorías que determinan cada tipo de señuelo, pero chicos, que pereza estar de tras de todo el mamoneo, esto lo dejo a los más frikies del planeta y disfruto aprendiendo virguerías de ellos. Ojo al vídeo de este plástico, ahí se ve el arte que tiene.
Gracias por haberte tragado hasta el final este reducido e imperfecto manual sobre los siete paseantes hundidos para lubina, esperemos pueda ser de ayuda al momento de elegir tus herramientas, ciao.
Swimbaits duros algo más de información sobre estos señuelos tan realistas que están obteniendo siempre más atención y personas interesadas en usarlo.
Estos cebos duros empezaron a verse durante los años 80, se crearon para pescar black bass en los grandes embalses de California en los que los depredadores solían alimentarse con las truchas arcoíris que repoblaban aquellos lagos. Pueden ser en dos tramos articulados, normalmente conocidos como Glide Bait o en más segmentos. El numero de tramos del swimbait articulado duro define también la acción, el de dos tramos suele responder de manera muy natural a una recuperación linear, mientras al de más tramos permite quiebros y respuesta más erráticas que podrían o menos ser interesantes dependiendo de la actividad de la carnada.
La principal característica de los este tipo de swimbaits es que la exploración del realismo es la más elevada posible. Cada detalle del cebo se remonta a la librea del pez que quiere imitar llegando a alcanzar niveles absolutamente notables en especial cuando de trata de pez pasto como el Ayu, la Trucha Arcoiris o inclusive el black bass. A simple vista, un swimbait que nada a 15 metros de nosotros no nos resultará fácil distinguirlo de un pez en carne y escamas, sobre todo si quien lo utilizas está recuperando de manera metódica y regular y así logrando un coleteo súper realista.
No está de más recordar que estos señuelos se desarrollan y fabrican con una meta bien definida, capturar grandes depredadores y hasta la fecha se han ido superando una y otra vez los límites del tamaño máximo de estos señuelos, llegando ya a cebos de treinta centímetros de más de 400 gramos de peso, una verdadera burrada que, además, puede llegar a costar varios billetes de 100€. Dejando de lado los récords de longitud o peso, es cierto que en general se trata de bicharracos de buen porte, y esto, además de conseguir el objetivo número uno, es decir desencadenar ataques de depredadores de porte - aunque sabemos que los hay pequeños y atrevidos - también evita un hecho importante, que el pez se clave muy adentro en la boca y resulte difícil quitarle los triples porque se han enganchado en la boca del estómago o en las agallas.
Los Swimbaits articulados duros se suelen utilizar con equipos de casting potentes, no se hasta que límites se ha llegado en España, pero es muy común tener que lanzar un cebo de más de 60 gramos como un Gan Craft Jointed Claw 178 que pesa justamente 60 gramos o un IMA Glide Fluke 178 cuya versión hundida alcanza los 80 gramos. Aún así, y que me disculpen los puristas, pescar con Swimbaits con cañas de spinning tampoco es herejía, sobre todo si no somos prácticos de lanzado con los baitcasters o aún más si pescamos en el mar, donde a menudo el viento nos sopla en una posición desfavorable, con todas las problemáticas que conlleva equilibrar la bobina de una carrete de casting con el aire de morros. Para los expertos en carretes de bobina giratoria los problemas se reducen de manera drástica, pero para aquellos que siempre han pescado con equipos de bobina fija, no es tan fácil, así que sin cortarse un pelo engancha tu favorito al bajo de línea, levanta el pick up y leña al mono.
Para pescar con swimbaits en el mar no solo disponemos de señuelos que vamos adaptando del agua dulce, sino que igualmente podemos contar con Swimbaits articulados duros expresamente diseñados para la lubina, por ejemplo, los japoneses ciertamente no se dejan escapar la oportunidad de sacar buenas Suzuki con señuelos tan exitosos y hay modelos como el Sea Drive de Evergreen que tiene un tamaño y peso de 28 gramos para poderse lanzar con equipos de potencia MH o H. Al mismo tiempo, si lo que queremos es disfrutar de esta pesca en el mar cazando los grandes depredadores como anjovas, palometones, serviolas o dentones, siempre podemos meter mano a los cebos de mayor tamaño y sacar el equipo XH con un buen trenzado que aguante las carreras de esos magníficos depredadores, en este caso quizás metería mano a los anzuelos por unos específicos de mar y además robustos.
No nos vamos a extender más en hablar de los Swimbaits articulados duros, como habéis comprendido este artículo no ha sido escrito por un experto ni tiene pretensiones de competir con la abundante literatura que hay en la red, mucha en inglés, pero esperamos que haya podido ser de ayuda para comprender un poco más este fenómeno que ha venido para quedarse y que, sobre todo en el mar, es todavía una herramienta estratégica, desconocida por la mayoría de los depredadores. A disfrutar niños que son dos días.