Sabemos cuáles son los mejores señuelos spinning en el mar, lo tenemos clarísimo y hay pruebas irrebatibles de ellos, llevamos más de treinta años lanzando cacharros de plástico, madera, resinas y metal por los mares del mundo, y las estadísticas son aplastantes, no hay por donde encontrar una fisura. Es un bloque de hormigón que nivela todo el saber de la pesca en unas pocas sentencias, así es, redundamos, sentencia por completo lo hasta ahora conocido por el ser humando en cuanto a pesca a spinning en el mar se refiere.
Antes de revelar nuestro secreto, nos preguntamos si alguna vez os habéis puesto a pensar en los mejores señuelos para spinning en el mar. Si en base a vuestra experiencia, habéis empezado a atar nudos e hilar perfiles hasta lograr capturar el verdadero amo de vuestros días de pesca, la piedra filosofal que todo lo transforma en oro, y cada salida en un rotundo éxito.
Para un escaso amante de las estadísticas como este servidor la hazaña podría revelarse más ardua de lo previsible, aquello de combinar número, o solo tener unos cuantos delante en aparente orden me provoca algo de pánico. Sin embargo, a pesar de mi poca destreza con el invento que los árabes entregaron a la humanidad en la forma que conocemos, he podido descubrir los mejores señuelos spinning en el mar, me ha costado, pero finalmente, en un momento de riego he captado el mensaje que madre tierra me estaba transmitiendo.
Hay episodios por los cuales tienes que pasar hasta llegar a alcanzar el conocimiento, ese místico momento en el cual desaparece la niebla y vuelve la luz. Uno de ellos es tan simplemente cegador que muchas veces no logramos entenderlo, es como cuando no consigues ver el bosque a causa de los árboles. Lo tienes a 5cm de tu cara y no te enteras.
En un apetecible día de primavera te encuentras pescando a spinning con tu compi en un lugar que promete muy bien, se ve actividad, las lubinas en caza han dado muestra de si y tu amigo acaba de sacar un dentón y una anjova de buen tamaño. Estáis pescando ambos con el mismo señuelo, el, que conoce bien la zona te ha recomendado de comprarte justamente ese paseante de ese color porque no falla. Para él es uno de los mejores señuelos para spinning en el mar. Tu, atento a sus sugerencias te has llevado dos, por si acaso.
Según va aclarando el día tu amigo empieza a coleccionar una serie de piezas importante mientras tú, amén de ponerle todo el empeño del mundo no mueves una cola, bueno una si, de una lubina pequeña que te rechaza el paseante casi de inmediato. La cosa se pone algo tensa, pasas tu tiempo con la cámara en la mano haciendo foto a tu sonriente amigo con una y otra captura, y por dentro te estás preguntando que es lo que pasa si ese es de los mejores señuelos spinning en el mar.
Así me lo aprendí yo en un arrecife del Mar de Coral pescando desde el barco juntos con un amigo francés que dominaba muy bien el uso de un stickbait para GT mientras yo, que le utilizaba por primera vez no conseguía sacar un merito desde aquel acuario. Tres lances cada uno y el marcaba, yo sin embargo me tenía que poner a hacer foto, de tal manera que, al rato, dejé mi caña a otro pescador y me puse a tirar de sensor.
¿Tenemos entonces claro el común denominador de estas dos situaciones? Diría que sí, chicos listos: dos pescadores, un solo tipo de señuelo, dos resultados diametralmente opuestos. ¿Pero no teníamos en nuestras manos los mejores? ¿Qué puede haber ocurrido? ¿Dónde nos hemos equivocado?
Os contestaré a la gallega, con una pregunta. ¿Estamos seguros de que nos hemos equivocado? Me explico mejor, porque sino aquí al final nos liamos. Digamos que es probable que nos hayamos equivocado en algo, pero desde luego no ha sido en la elección de los mejores señuelos spinning en el mar sino en otra cosa, algo más personal, que va con nosotros mismos, con la manera que tenemos de pescar, con nuestra confianza y sensibilidad. Eso es, sensibilidad, quizás la clave de vuelta de toda esta historia.
Hablamos en plata nenes, este servidor vive de una tienda de pesca y se pasa el día vendiendo señuelos infalibles, jerkbait que vuelven locas a las lubinas y paseantes indispensables para las anjovas. He probado muchos y puedo compartir mi experiencia, deciros como y cuando me han dado peces, o reportar historias de pesca de otros amigos que a diario me cuentan como les van. Sin embargo, lo que no puedo hacer, a parte transferir una información en parte valiosa y daros confianza sobre esto o aquello, es meterme en vuestra muñeca, infiltrarme en vuestra cabeza y con un clic trasladar mi experiencia o la de los demás.
Supongo que poco a poco nos vamos metiendo en el juego, ya me estáis cazando, siento que nos acercamos. Algunos seguramente ya habrán entendido cuales son los mejores señuelos, y creo que ha llegado el momento de cerrar el círculo y sin más rodeos, llegar a la revelación del secreto.
No existen los mejores señuelos spinning en el mar. O bien todo lo contrario, es decir, todos son los mejores señuelos spinning en el mar.
Matizamos. Es evidente que Márquez hace con la Honda cosas que otros no logran ni imaginar, y estamos de acuerdo con ello, el es un fenómeno, pero también tiene un punto a su favor, consigue sacar de aquella moto “algo” que ni Pedrosa ni Crutchlow consiguen, como Dovi y Lorenzo para hacer otro ejemplo, pero en Ducati. ¿Me seguís?
Si tu y yo nos ponemos a mover un señuelo cualquiera y yo pesco más que tu es probable que haya encontrado la manera, a través de la sensibilidad y quizás también de la experiencia, para poderle sacar el máximo provecho y para ti sin embargo, resulte un cacharro arduo de mover bien, y no le pillas el ritmo. De repente quitas uno de los señuelos que te hayan recomendado, pones uno que tu conoces y dominas y vuelve el equilibrio.
¿Existen entonces los mejores señuelos? Sin duda existen, pero no son los mismos para todos, hay que ir probando hasta encontrar la prolongación de nuestra muñeca, ese artificial al que consigamos darle vida a pesar de ser materia inerte, y que a nuestras órdenes se moverá como el más perfecto de los engaños, embobando a los depredadores.
Lo malo de todo esto es que en la búsqueda de los mejores señuelos spinning en el mar nos toparemos con algunos que no conseguimos enamorar, que nos decepcionan. Lo primero que nos pasaría por la cabeza sería deshacernos de ellos regalarlos o venderlos, pero os voy a dar una idea. Mejor guardarlos, porque nosotros como pescadores vamos evolucionando, acumulamos experiencia, pescamos con otras personas que nos pueden traspasar información, ideas y parte de su experiencia, y quizás, en uno o dos años, ese jerkbait que no podíamos ver, se podría transformar de nuevo en un ganador.
Último truco del día. Cuando os llega un señuelo nuevo perder tiempo con ello. Ir probando, trastead, jugar con todos los tipos de movimiento que os ocurran, hasta que se cuadre el círculo y que se forme un feeling entre los dos. Puede que no sea uno de los mejores señuelos para spinning en el mar para todos, pero si para vosotros.
Nicola Zingarelli
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